En este mundo cambiante y acelerado que nos propone la globalización y un factor fundamental para la supervivencia de las organizaciones es la innovación y la creatividad; actualmente no basta solo con ser competitivos, tener un buen precio o un producto asequible a nuestro cliente. Es necesario diferenciarnos y hacer que nuestras organizaciones sean mejores y diferentes, necesitamos innovar y disponer de personas altamente creativas.
El mundo está lleno de interrogantes y constantes cambios de paradigmas que requieren soluciones creativas, por eso cuando logramos desarrollar la creatividad esto se convierte en uno de los aspectos más importantes para el éxito de los países, de las organizaciones y de los individuos. Albert Einstein decía: “la imaginación es más importante que el conocimiento”
La verdadera ventaja de las empresas en la cuarta revolución industrial estará centrada en dos habilidades principales: la habilidad para aprender y la habilidad para cambiar. Por tanto, es importante emprender estrategias para desarrollar la capacidad creativa de las personas en todos los niveles y áreas.
La creatividad es el proceso de darle vida a nuevas ideas imaginativas, mientras que la innovación es la transformación de aquellas ideas en productos, servicios o prácticas tangibles.